PARA VARIAR, EL PRESIDENTE NO SABE NADA DE NADA Rajoy se ríe de los españoles y se niega a dar explicaciones sobre la red de ´sobres negros´ en el PP

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sigue tomando a todos los españoles por estúpidos. Una vez más, Rajoy se defiende diciendo que "no sabe nada" de lo que pasaba –literalmente- en sus mismas barbas, y niega tener conocimiento de la red de reparto de dinero negro que dirigía Luis Bárcenas cuando era su hombre de confianza en el PP. Eso sí, ha prometido que el día que se entere de algo, "no le temblará el pulso" para tomar medidas.

El Presidente, a los medios de comunicación que hacían guardia a las puertas de la XX Intermunicipal que el PP celebra en Almería, tan sólo esa contestado un –supuestamente- irónico “si hombre” a la pregunta de si se pagaban generosos sobresueldos en negro a la plana mayor del partido de la gaviota.

Posteriormente, ante un público fiel pero asustado y –en buena medida indignado- por las revelaciones que están dejando al descubierto las alcantarillas del PP, no se ha dignado entrar en materia, ni ha ofrecido argumentos verosímiles que desmonten las más que verosímiles acusaciones lanzadas desde los medios de comunicación que señalan cómo Bárcenas, al tiempo que presuntamente se enriquecía ilícitamente, repartía una jugosa parte del dinero obtenido en mordidas, comisiones y contrataciones ilegales entre el resto de la dirección nacional de su partido.


Rajoy no explica por qué ha pasado de costear la defensa de Bárcenas a alegrarse de que “ya no es del PP”. No ha compartido la evolución argumental que le ha conducido, desde la posición inicial de defender a capa y espada la inocencia de su tesorero a tirarle a los pies de los caballos, en una evolución que recuerda a la de su otrora amigo, ex ministro y hombre de confianza en Baleares Jaume Matas.

Rajoy, por no hacer, ni siquiera ha pedido perdón a los cientos de militantes honrados y trabajadores, concejales y alcaldes de todo tipo de municipios, que están viendo manchada su reputación por que su jefe de filas, en el mejor de los casos, no sabe elegir a sus más directos colaboradores (Bárcenas, Camps, Matas, Galeote…), y mucho menos se entera de lo que realmente hacen al amparo de la larga y supuestamente ignorante sombra de Rajoy en el PP.

Eso si, el único mensaje que ha intentado ser tranquilizador, si es que ello es posible dada la pobreza argumental de la posición del Presidente es que ha prometido que actuará sin que le tiemble la mano el día que al fin sea capaz de entender lo que pasa a su alrededor  y descubra algún corrupto.

Por lo demás, ha usado una frase ciertamente alambicada para refrendar que en el pasado, en el PP nadie cometió irregularidades ni se beneficio de contabilidades clandestinas. El que al parecer, no se entera de nada, no lo asegura, pero cree en lo que dicen los últimos tres secretarios generales del partido: Javier Arenas, Ángel Acebes y María Dolores de Cospedal, que le han dicho "claramente" que la actuación del partido se ha "ajustado a la legalidad".

"Si alguna vez tengo conocimiento de irregularidades o de conductas impropias que afecten a militantes de nuestro partido, no me temblará la mano porque es una de mis responsabilidades, y no la menor. Una de mis responsabilidades es que el PP se siga comportando y siga siendo percibido como un gran partido de personas honradas y dedicadas a mejorar la vida de su país", ha declarado en la clausura de la XX Intermunicipal que el PP celebra en Almería.

PERSONAS QUE "YA NO ESTÁN EN EL PARTIDO"

   En su discurso, el presidente del Gobierno ha querido dejar claro que este caso afecta a personas que "estaban asumiendo responsabilidades" en el Partido Popular pero que "ahora ya no están". "El partido actuó y se adoptaron las responsabilidades políticas", ha recalcado, para subrayar que este asunto está en los "tribunales" y son éstos los que tienen que actuar en este momento.

   "Eso tiene que ser motivo de tranquilidad para todos, que las instituciones funcionen y lo hagan normalmente, cumpliendo con su función. Ésta es la auténtica tranquilidad para los ciudadanos y los políticos honrados, que actúe la Justicia, que cuenta con el apoyo de este partido", ha declarado. Sin embargo, en ningún momento ha ofrecido la colaboración del PP con la justicia para esclarecer no sólo el origen y manejo de los muchos millones que se le han descubierto a Bárcenas en Suiza y otros paraísos fiscales, sino la decena de escándalos que recorren el PP desde Galicia a Valencia, desde Baleares a Andalucía, de Madrid a las dos Castillas. Al contrario, han  pasado a los anales del obstruccionismo legal algunas de las múltiples maniobras protagonizadas por los abogados del PP, eficazmente dirigidos en muchas ocasiones por otro viejo amigo de Mariano Rajoy, el actual embajador en Londres Federico Trillo, responsable, por cierto, durante una buena temporada de la estrategia de defensa legal de Bárcenas. Pero eran otros tiempos.


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