dimarts, 5 de febrer del 2013

Rajoy se vuelve de Alemania con la ´cara colorá´ y las manos vacías

MARTES, 5 DE FEBRERO DE 2013
ANTONIO FERNÁNDEZ

Mariano Rajoy, Presidente del Gobierno de España, ha viajado hasta Alemania, donde no se estilan las comparecencias a través de un televisor y sin preguntas, para tener que responder a todo un rosario de cuestiones sobre sus supuestos cobros en negro y la trama de financiación ilegal y sobresueldos de su partido. Al menos, ha tenido algo sobre lo que hablar, porque el resto del viaje se ha saldado con un rotundo fracaso.

 Hay que reconocer, en honor a la verdad, que un gobierno como el actual, en el disparadero mediático por presunta corrupción y con todos los indicadores económicos y políticos instalados en la zona roja de peligro, no es el mejor interlocutor para enfrentarse a Angela Merkel, la canciller alemana, y conseguir que sus decisiones económicas sirvan a los intereses generales de la recuperación económica de la eurozona y no sólo favorezcan a las empresas alemanas.

Merkel, que hace unos meses obligó a dimitir a su ministro de Defensa por plagiar su tesis doctoral, escuchó impertérrita, pero con cara de pocos amigos, el vendaval de preguntas buscando que Rajoy aclarase el aparentemente turbio mundo de los pagos y los cobros y la contabilidad A, B o C en el PP. Su cara parecía reflejar que no entendía nada a pesar de contar con traducción simultánea.


Lo que si entendió, pero para rechazar de manera categórica, fueron las peticiones de Rajoy para que Alemania se implique en la reactivación económica, y no sólo en la exigencia de nuevos recortes. Lo más que obtuvo Rajoy, pese a desplegar su indudable encanto gallego ante Merkel y tratarla cariñosamente en público de “Angela”, fue sus condolencias por las insoportables cifras de paro juvenil que soporta España en estos momentos. ‘Angela’ se mostró dispuesta a dictarle a Rajoy algunas líneas para que mejore la formación profesional en España. Quizás para que se adapte mejor el curriculum académico a las necesidades de las empresas alemanas, que se han convertido en las grandes empleadoras de la mano de obra cualificada española.

Pero sobre políticas de reactivación “nein, nein, nein”. La canciller se ha escudado en que "se nos critica a nivel interno (en Alemania) por no ahorrar lo suficiente". Sin embargo, ha ofrecido su particular visión de lo que es la solidaridad comunitaria: "Si tenemos una buena demanda interior alemana, también ofrece buenas oportunidades de exportación para España, para Portugal y otros. Cuanto más dinero tengan los ciudadanos alemanes, más podrán irse de vacaciones, comprar", ha explicado.  Por tanto, habrá que esperar a que Alemania y los alemanes se enriquezcan más para que nos lleguen sus sobrantes.

http://www.diarioprogresista.es/articulo.asp?idarticulo=22957